El coche más vendido de Europa está llegando a la mitad de su vida. Como es habitual, Volkswagen ha sido cauteloso con el estilo, pero el aspecto técnico del coche ha recibido una importante actualización. ¿Tiene el renovado Golf lo necesario para mantener su liderazgo? La respuesta está en esta primera prueba con el nuevo 1.5 TSi Evo.
El Golf ha sido el líder del mercado de coches compactos en Europa durante casi 20 años y es como un faro en la tormenta, señala el concesionario de coches segunda mano Madrid Crestanevada. A pesar de los repetidos ataques del Peugeot 308, el Opel Astra y el Ford Focus, el alemán se mantiene plácido mientras sigue atrayendo a casi medio millón de clientes cada año en el Viejo Continente.
A la vista de los volúmenes industriales, es comprensible que el fabricante vuelva a ir a lo seguro. Los ligeros cambios de esta segunda fase se refieren a los salpicaderos delantero y trasero. La firma luminosa pasa a ser full LED, según la versión, al igual que los indicadores que pueden adoptar la función de «desplazamiento». La única excentricidad proviene del color amarillo de lanzamiento. En definitiva, nada se parece más a un Golf nuevo que a un Golf viejo.
A bordo, es casi una revolución en comparación con los avances exteriores. Al igual que sus hermanos y primos (Volkswagen Passat, Audi A3, etc.), el Golf cuenta con el virtual cockpit. Se trata de un cuadro de instrumentos totalmente digital que combina la instrumentación, la navegación y el sistema multimedia. Al mismo tiempo, la pantalla multimedia está evolucionando. Se hace más grande según el nivel (de 6,5 a 9,2») y puede equiparse con un innovador control gestual que permite controlar varios equipos (sonido, llamadas, etc.) con un gesto de la mano. Se trata de una primicia en el mercado de los coches compactos y se ofrecerá como opción o en los modelos de gama alta. Se trata de un puro artilugio cuyo único interés es consolidar la supremacía tecnológica del coche compacto sobre la competencia.
Otra innovación es el cambio a una instrumentación 100% digital, como los demás miembros del grupo. Por último, siempre en el registro de la alta tecnología, el alemán está equipado con un sistema de conducción semiautónoma en atascos, asistencia de remolque y aparcamiento automático de última generación. Estos sistemas suelen ser ofrecidos por fabricantes de alta gama o de categorías superiores.
Sin embargo, no hay cambios en cuanto a la practicidad, ya que el alemán tiene una de las mejores relaciones espacio/dimensión interior de la categoría. El volumen de carga está en la gama media baja con 380 litros.
Tras el Dieselgate, Volkswagen anunció públicamente su intención de orientarse hacia la gasolina y las nuevas energías. Este restyling es una oportunidad para que el Golf reciba un nuevo motor de gasolina de 4 cilindros: el 1.5 TSi ACT Evo con 150 CV y desactivación de cilindros. Se trata de una evolución del 1.4 TSi ACT 140 que desactiva dos de los cuatro cilindros a los regímenes más bajos. Cuando estás en la ciudad, por ejemplo. El objetivo es ofrecer niveles de consumo ultrabajos. Volkswagen afirma un consumo combinado de 4,9 l/100 km; nosotros encontramos algo más de 6 l/100 km. En uso, el motor de cuatro cilindros se mueve con facilidad bajo el capó del alemán. El elevado par motor (250 Nm), la construcción ligera y la caja de cambios DSG revisada para la ocasión refuerzan el placer general del vehículo. En la ciudad, apreciará su funcionamiento silencioso, su gran flexibilidad y sus niveles de consumo mantenidos con la desactivación de los cilindros. En las carreteras principales, el 1.5 ofrece una buena respuesta, bien apoyada por una caja de cambios DSG7 con gestión optimizada. Con las emisiones limitadas a 118g de C02/km, está exento de la sanción. En cambio, en las carreteras secundarias, muestra una ligera falta de empuje a la hora de arrancar con fuerza, como cuando se aproxima un adelantamiento.
Una versión de 130 CV de este motor, con la etiqueta BlueMotion, aparecerá a finales de este año. Este último estará incluso equipado con un modo de «rueda libre», es decir, el motor se apagará durante la deceleración.
En cuanto a las transmisiones, la DSG-7 sustituye a la DSG-6 en el catálogo con el objetivo de reducir aún más los niveles de emisiones, ya que Volkswagen anuncia hasta 10g menos de CO2. La gran mayoría de los motores de gasolina y diésel también son neutros en cuanto a malus. Esto es una rareza en este momento desde el endurecimiento del baremo. Por último, el motor 1.0 de gasolina de 3 cilindros de la versión básica ha sido actualizado a una versión sobrealimentada. Este motor desarrolla ahora 85 CV y ofrece un bajo consumo de combustible de 4,8 l/100 km.
En términos de manejo, Volkswagen no ha hecho ningún cambio. Los modelos de gama alta (por encima de los 120 CV) siguen teniendo derecho al eje trasero multibrazo que refuerza el nivel de confort y el catálogo de opciones sigue ofreciendo un eficaz sistema de amortiguación controlada. Si metes la mano en la cartera, puedes configurar tu Golf como quieras, pero el coche básico alemán es extremadamente riguroso y eficiente. Es casi difícil creer que estás al volante de un coche de uso general si tienes en cuenta las prestaciones dinámicas y el nivel de seguridad activa (control de crucero adaptativo, frenado automático en caso de detección de obstáculos, asistente de carril, etc.).