Tratamiento láser endovenoso

La ablación láser endovenosa utiliza el calor de los láseres para encoger y colapsar las venas enfermas. El procedimiento proporciona muy pocas molestias y la recuperación es generalmente muy rápida. A diferencia de la extirpación quirúrgica de venas, la ablación láser endovenosa no requiere prácticamente ningún tiempo de inactividad. Esta técnica da lugar a muchas menos complicaciones y efectos secundarios que la extirpación venosa quirúrgica tradicional.

El procedimiento

El Sistema de Venas EndoLaser es una técnica avanzada que comenzó en 2001. El procedimiento implica el uso de un láser para calentar el vaso enfermo desde el interior de la vena, causando que la vena se encoja o colapse. Este láser proporciona una alternativa más suave y no quirúrgica a la tradicional extirpación quirúrgica de venas.

En las experimentadas manos del cirujano vascular el procedimiento toma aproximadamente 30 minutos. El médico administrará un anestésico local a la vena y el área circundante para asegurar una mínima molestia durante el tratamiento. El procedimiento se realiza a través de una pequeña muesca en la piel para evitar la cicatrización. Usando el ultrasonido como guía, una pequeña fibra de láser se inserta en la vena objetivo a través de la mella en la piel. En lugar de remover la vena quirúrgicamente, la energía láser es suministrada a través de la pequeña fibra láser, usando eficazmente el calor para sellar la vena.

¿Qué condiciones trata?

La ablación láser endovenosa está indicada para pacientes que tienen flujo sanguíneo inverso (reflujo) que se origina en la parte superior de la pierna en la unión safeno-femoral. Un ultrasonido es la forma más precisa de hacer este diagnóstico. Los pacientes con este reflujo a menudo tienen grandes venas varicosas. Este procedimiento de tratamiento de varices en Granada tiene una tasa de éxito superior al 98% para el tratamiento de grandes o dolorosas venas varicosas.

¿Soy un candidato?

Si sufre de grandes venas varicosas, puede ser un candidato para la ablación endovenosa con láser. Su médico puede realizar las pruebas adecuadas para decidir si usted es realmente un candidato.

Recuperación

La ablación endovenosa con láser se realiza bajo anestesia local y requiere poco o ningún tiempo de inactividad. Se anima a los pacientes a que caminen después del procedimiento, y pueden volver al trabajo y a otras actividades normales el mismo día. El ejercicio regular debe reanudarse después del procedimiento para ayudar a la circulación. Las vendas o medias de compresión también pueden ayudar a mejorar el flujo vascular. Durante la primera semana después del tratamiento deben evitarse las actividades extenuantes y estar de pie durante largos períodos de tiempo. El dolor posprocedimiento suele ser insignificante, pero puede tratarse con analgésicos si es necesario.

Posibles riesgos

Los riesgos de este procedimiento son mínimos cuando se está bajo el cuidado de un médico especialista en varices con experiencia. Las complicaciones son raras pero pueden incluir un leve entumecimiento del muslo, una sensación de tirón, enrojecimiento o sensibilidad, infección en el lugar de la incisión y moretones. Estos problemas generalmente se resuelven por sí solos sin atención médica. La trombosis venosa profunda es un efecto secundario extremadamente raro que puede evitarse utilizando las prendas de compresión adecuadas para asegurar una circulación correcta.